Vale. Has terminada tu novela después de tres años de trabajo. Tres años de quitarle horas al sueño de madrugada, de sacar un ratito a mediodía entre mañana y tarde, de no leer todos esos libros que sigues teniendo pendiente. Tres años de dudas e ilusiones y ¡por fin! has terminado de escribirla. Estás orgullos@ de tu esfuerzo.
No sólo eso. Has redactado una carta de presentación primorosa, seleccionando palabra por palabra. Te has informado de qué editoriales pueden estar interesados y qué agentes están dispuestos a escucharte de primeras aunque seas un desconocido. Todo eso y más lo trata de una forma excelente Teo en su blog Fantástica Literatura que recomiendo vehementemente.
Ahora bien. ¿Es buen momento de dar a conocer mi libro?
Al igual que la NASA, para lograr nuestro objetivo hemos de aprovechar las "ventanas" que a lo largo del calendario anual nos permite una óptima aproximación a los agentes y a los editores. Fuera de esas "ventanas temporales" es más que probable que nuestra obra sea despedida al expacio exterior, al vacío. Es decir, fuera de la órbita editorial.
Estas mis pesquisas desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre:
Enero: fecha clave 6 de enero (Reyes). La primera semana del año ningún libro será aceptado, lo que urge son las ventas, no los nuevos talentos. Del 7 al 31 de enero: están adelantando trabajo atrasado de diciembre del año anterior y del mes. Es una mala fecha. El día 6 de enero se falla el Premio Nadal.
Febrero: fecha clave 14 de enero (Enamorados). Un día propicio para ventas. Nada que hacer hasta el día 15, de nuevo urgen las ventas y promociones. En este mes existe una "ventana temporal" del 15 al 28.
Marzo: fecha clave 19 de marzo (Día del Padre) Buen mes para presentaciones. Existe una "ventana temporal" desde el día 1 hasta el día 14. Del 15 al 19 todo está encaminado al regalo del padre, que puede ser un libro. A partir del 20 hasta fin de mes se empiezan los preparativos para el mes siguiente,el mes grande.
Abril: fecha clave el 23 de abril (Día del libro y San Jordi). Como el 80% del mundo editorial se mueve desde Barcelona, todo el mes está impracticable para el novato. El negocio es el negocio. y además hay que preparar las ventas para el primero de mayo.
Mayo: fecha clave 1 de mayo (día de la madre). Por lo general las mujeres leen mucho más que los hombres, así que se aprovecha abril para sacar una ingente cantidad de novedades para esta fecha. Del 2 al 15 se aprovecha para adelantar trabajo atravesado. Hay una buena "ventana" del 16 al 25. Es la epoca de buscar nuevos talentos.
Junio: fecha clave 3 de junio (Feria del libro de México) Una de las principales ferias de habla hispana. Del 1 al 15 se adelanta trabajo atrasado y se preparan novedades para latinoamérica. Existe una buena "ventana" del 16 al 30 de junio.
Julio: no hay fecha clave. Existe una buena "ventana" del 1 al 15, para aceptar nuevas propuestas editoriales y de representación. Del 16 al 31 se dedican a ultimar acuerdos y cerrar tratos antes de las vacaciones, así como a adelantar trabajo atrasado (siempre hay trabajo atrasado)
Agosto: mes a medio gas; eso quiere decir que: (1)el que te tiene que atender no está hasta septiembre, (2) el que te tiene que atender, si está, te puede atender porque está algo más libre. Es un buen mes para iniciar contactos.
Septiembre: Un mes horrible. Todo el mundo se reincorpora de vacaciones. Hay que ponerse al día con lo que se contrató en julio y además, hay que empezar los preparativos para la Feria de Frankfurt. No hay ventana definida.
Octubre: otro mes disperso. Además de salchichas y cerveza Frankfurt devora todos los recursos literarios del continente. Entre la feria y el cierre de acuerdos posteriores, el mes está perdido para el novato. En este mes se falla el Premio Planeta.
Noviembre: fecha clave no hay. Del 1 al 15 hay que ponerse al corriente del papeleo atrasado. Existe una buena ventana del 16 al 30.
Diciembre: Impracticable. Entre los puentes y vacaciones, y los preparativos para las ventas de Navidad, este mes es el peor de todos. Además, agentes y editores tienen que adelantar todo el papeleo atrasado, porque se acaba el año fiscal. y aún así dejarán cosas pendientes para después del día 6 de enero.
Por supuesto que cada agente o editor será más o menos accesible en otras fechas según el volumen de trabajo atrasado que tenga en ese momento. Trabajo atrasado siempre tienen, porque el mercado editorial es un maremagnum de novedades por oleadas año tras año. ¡Pero también hay que ser valientes!