—Insh Alláh, Insh Alláh... —El imán extendió las manos mientras hablaba desde el almimbar de la mezquita mayor de Granada, deseando parabienes a la concurrencia, y a los novios, nerviosos y felices.
La mezquita mayor, en el corazón de la ciudad, rodeada de tiendas de cambistas, de perfumistas y de la alcaicería con sedas de la Alpujarra y orfebrería del oro del Sudán, más allá de Siyilmassa; el corazón religioso de la medina.
—Insh Alláh, Insh Alláh..
—Ojalá, ojalá...
—Dios lo quiera, Dios lo quiera...
Ayer estuve de boda. Se celebró en el Sagrario, adyacente a la catedral renacentista terminada en 1563 con Diego de Siloé como maestro de obras. En el corazón católico de la ciudad tomada por los reyes Isabel y Fernando a los nazaríes, se levantó la iglesia parroquial de El Sagrario sobre el solar de la antigua mezquita mayor. En esa iglesia de raíces pétreas que se alimentan de pasado de Reconquista y de aljibe musulmán (aún existe, oculto en los subterráneos), oír al sacerdotesu sermón empezando con "Ojalá, ojalá" me sumió en un viaje de siglos evocador, inspirador. ¡Qué rico es nuestro pasado!
La novia estaba radiante.
Bitácora 006/365
Pues sí, Hemingway fue rechazado veintisiete veces, veintisiete nada menos, veintisiete editoriales que lo descartaron mondo y lirondo. Que luego ganara el premio Nobel de literatura no es lo importante, sino que encajó veintisiete derrotas una tras otra y sin embargo volvía a levantarse. Todo un peso pesado de las letras.
domingo, 31 de mayo de 2015
domingo, 24 de mayo de 2015
Edmundo de Amicis 005/365
Y ahora, el lector acompáñeme al hotel a tomar un poco de aliento.
Una gran parte de lo que hasta aquí he descrito, lo visitamos mi amigo y yo el día mismo de nuestra llegada; imagínese el que que lo lee, cómo debíamos tener la cabeza al volver a la fonda, cuando caía la noche.
Durante el camino, no dijimos ni una palabra; y apenas hubimos entrado en el cuarto, nos dejamos caer sobre el sofá, mirándonos cara a cara, y preguntándonos los dos a un mismo tiempo:
—¿Qué te parece?
—¿Qué me dices?
—¡Y pensar que he venido aquí para pintar!
—¡Y yo para escribir!
Y ambos nos sonreímos en señal de fraternal compasión.
Aquella tarde, en efecto, aun durante algunos días después, si Su Majestad Abdul-Aziz me hubiera ofrecido en premio una provincia de Asia Menor, no me hubiera atrevido a escribir diez líneas seguidas acerca de la capital de sus Estados; tan cierto es, que para describir las grandes cosas, es preciso hacerlo de lejos, y para acordarse bien, haberlas olvidado un poco.
¿Y cómo hubiera podido escribir en un cuarto, desde el cual se contempla el Bósforo, Scutari y la cima del Olimpo?
Edmundo de Amicis, "Constantinopla" (ALMED Editorial)
Y es que leer es eso, provocar envidia con lo que las páginas escritas te descubren: más vidas, más personas, hombres y mujeres, ciudades maravillosas... que este mundo de miserias también tiene grandezas que inspira a querer escaparse y a recorrerlo, a aprender idiomas, a beber café en Estambul y a detenerse para saborear todo lo que nos rodea.
La vida moderna de oficinista nos encierra en un cubículo, y todo eso nos lo perdemos. Ya no miramos a la gente, ni nos preguntamos por qué. Por qué corremos de un lado para otro, huyendo para no vivir.
Quiero volver a Bizancio / Constantinopla / Estambul. ¿Cuándo?
No quiero que me falte vida para ello.
Bitácora 005/365
Una gran parte de lo que hasta aquí he descrito, lo visitamos mi amigo y yo el día mismo de nuestra llegada; imagínese el que que lo lee, cómo debíamos tener la cabeza al volver a la fonda, cuando caía la noche.
Durante el camino, no dijimos ni una palabra; y apenas hubimos entrado en el cuarto, nos dejamos caer sobre el sofá, mirándonos cara a cara, y preguntándonos los dos a un mismo tiempo:
—¿Qué te parece?
—¿Qué me dices?
—¡Y pensar que he venido aquí para pintar!
—¡Y yo para escribir!
Y ambos nos sonreímos en señal de fraternal compasión.
Aquella tarde, en efecto, aun durante algunos días después, si Su Majestad Abdul-Aziz me hubiera ofrecido en premio una provincia de Asia Menor, no me hubiera atrevido a escribir diez líneas seguidas acerca de la capital de sus Estados; tan cierto es, que para describir las grandes cosas, es preciso hacerlo de lejos, y para acordarse bien, haberlas olvidado un poco.
¿Y cómo hubiera podido escribir en un cuarto, desde el cual se contempla el Bósforo, Scutari y la cima del Olimpo?
Edmundo de Amicis, "Constantinopla" (ALMED Editorial)
Y es que leer es eso, provocar envidia con lo que las páginas escritas te descubren: más vidas, más personas, hombres y mujeres, ciudades maravillosas... que este mundo de miserias también tiene grandezas que inspira a querer escaparse y a recorrerlo, a aprender idiomas, a beber café en Estambul y a detenerse para saborear todo lo que nos rodea.
La vida moderna de oficinista nos encierra en un cubículo, y todo eso nos lo perdemos. Ya no miramos a la gente, ni nos preguntamos por qué. Por qué corremos de un lado para otro, huyendo para no vivir.
Quiero volver a Bizancio / Constantinopla / Estambul. ¿Cuándo?
No quiero que me falte vida para ello.
Bitácora 005/365
jueves, 14 de mayo de 2015
El cariño de los lectores, desde Uruguay 004/365
14.05.2015 De hoy. El cariño de los lectores:
"El motivo de mi comentario es resaltar que he tenido la oportunidad últimamente como uruguayo de leer autores españoles de la altura de Blas Malo Poyatos, Julia Navarro, Santiago Posteguillo entre otros y destaco el talento de su pluma y la capacidad de enseñarte cuestiones históricas como si las estuvieras viviendo en primera persona, como testigo directo de los mismos.
Sin caer en prolegómenos redundantes y aportando ideas claras y precisas con un excelente toque de ficcion, donde sentimos y vibramos con los personajes, demostrándonos consecuentemente las miserias de la vida,el poder y la riqueza que nos subsumen en un mar de pensamientos. Obras ccomo "El Señor de Castilla" de Blas Malo o "Dime Quien Soy " de Julia Navarro y la trilogia Roma de Santiago Posteguillo son únicas en ese mundo de la escritura donnde es dificil estar y mantenerse. "
(Marcelo Arruda. "Redelibros.es" )
http://redelibros.es/social/posts/82610/marcelo-arruda
Y así uno se acuesta a las 2:00 am, con ganas de seguir escribiendo en vez de desilusionarse con negativismos. Desde Uruguay, nada menos.
Bitácora 004/365
"El motivo de mi comentario es resaltar que he tenido la oportunidad últimamente como uruguayo de leer autores españoles de la altura de Blas Malo Poyatos, Julia Navarro, Santiago Posteguillo entre otros y destaco el talento de su pluma y la capacidad de enseñarte cuestiones históricas como si las estuvieras viviendo en primera persona, como testigo directo de los mismos.
Sin caer en prolegómenos redundantes y aportando ideas claras y precisas con un excelente toque de ficcion, donde sentimos y vibramos con los personajes, demostrándonos consecuentemente las miserias de la vida,el poder y la riqueza que nos subsumen en un mar de pensamientos. Obras ccomo "El Señor de Castilla" de Blas Malo o "Dime Quien Soy " de Julia Navarro y la trilogia Roma de Santiago Posteguillo son únicas en ese mundo de la escritura donnde es dificil estar y mantenerse. "
(Marcelo Arruda. "Redelibros.es" )
http://redelibros.es/social/posts/82610/marcelo-arruda
Y así uno se acuesta a las 2:00 am, con ganas de seguir escribiendo en vez de desilusionarse con negativismos. Desde Uruguay, nada menos.
Bitácora 004/365
martes, 12 de mayo de 2015
Hanlin Yuan y la Gran Enciclopedia del Mundo 003/365
Pekín, 24 de Junio de 1900: Las escasas tropas aliadas
occidentales se enfrentan al poderoso movimiento nacionalista chino.
Intentando acabar con los occidentales, los chinos prenden fuego a
varios edificios alcanzando al edificio HanLin Yuan.
Este edificio conservaba la única copia existente (la otra desapareció en 1449) de la "Gran Enciclopedia del Mundo", o enciclopedia Yung-lo Ta-tien, obra monumental formada por 22.937 secciones sobre todas las cosas humanas y divinas y compuesta por más de 370 millones de palabras.
Fue culminada en 1407 y en ella trabajaron 2.000 sabios.
La obra estaba totalmente interrelacionada y se decía que para leer un párrafo era necesario conocer todos los dialectos.
También fue comparada con el mismísimo universo porque se supuso que nadie jamás sería capaz de recorrerla íntegra. Su fin era preservar la identidad china. Un inglés que presenció la destrucción (Lancelot Giles) se arrojó al fuego gritando "Yo salvé la sección 13.345 por mí mismo"
(De http://www.todolibroantiguo.es)
Bitácora 003/ 365
lunes, 11 de mayo de 2015
Comprar libros a ciegas 002/365
En la Casa del Libro de Málaga, han tenido una idea genial consistente en envolver
libros, dar pistas a los lectores e invitarles a comprar a ciegas. ¿Se
fiarán del criterio del librero?
¿Te fiarías tú?
Porque el librero se convierte así en un amigo, casi en un psicólogo. En un vaticinador: Eres lo que lees. ¿Leerás esto? Así, comprar libros vuelve a ser un descubrimiento, una sorpresa, un viaje al paraíso. Más, si cabe.
Bitácora 002/365. Gracias a Jesús Lens por la noticia.
¿Te fiarías tú?
Porque el librero se convierte así en un amigo, casi en un psicólogo. En un vaticinador: Eres lo que lees. ¿Leerás esto? Así, comprar libros vuelve a ser un descubrimiento, una sorpresa, un viaje al paraíso. Más, si cabe.
Bitácora 002/365. Gracias a Jesús Lens por la noticia.
domingo, 10 de mayo de 2015
Joseph Campbell y "El héroe de las mil caras". 001/365
Semana terrible. No sólo por la ingeniería y la política a todas horas salpicando (en la tele y en el trabajo), también en las redes sociales sobre la piratería digital, la desidia de las administraciones públicas, la desconfianza, la apatía, la indiferencia de los lectores, la desilusión. Por escribir, por crear, por comunicar.
La semana pasada leí un libro maravillloso. Joseph Campbell y "El héroe de las mil caras".
Y no he parado de pensar en él, en cómo los mitos han sido un puente durante milenios entre la dura realidad y la comprensión de las cosas. El viaje del héroe: la salida, el paso por el Umbral, y el consejo / guía del Guardián del Umbral; la iniciación, las pruebas (que son las pruebas de la misma vida), el logro de la meta; y el regreso. El reparto del elixir, del conocimiento. Un círculo, que se inicia. Una y otra vez.
He comprendido, no que Ulises era un hombre, sino que cada hombre es Ulises, o que cada hombre lucha por ser como Ulises, por no desfallecer, por marchar a Troya a luchar con la esperanza de regresar a Ítaca, pronto, tarde, ¡regresar!. He comprendido que los Portales están ahí, en cada actividad. Los portales y los Guardianes del Umbral. Al abrir un libro. Al conectarse a Internet. Al visitar a amigos y familia. Al atravesar cualquier puerta. Al poner el bolígrafo sobre un papel en blanco.
En una búsqueda errante de un Guardián que me guíe en mis pasos, he comprendido, que, pronto, yo mismo seré un Guardián cuando mi hijo cruce el Umbral que su madre ha estado preparando por meses. Ya falta poco. Sí. Por él, seré. Espero guiarle con fortuna.
Al igual que me he propuesto un Plan. Me he propuesto escribir todos los días una entrada, por 365 años. Algo positivo sobre libros, todos los días. No más negativismo. Es un Plan que me propongo. Escribir poco o mucho en este blog. Sea leído, o no. Espero que mi ilusión mejore con ello.
Buen domingo. Esta es la bitácora 001/365
La semana pasada leí un libro maravillloso. Joseph Campbell y "El héroe de las mil caras".
Y no he parado de pensar en él, en cómo los mitos han sido un puente durante milenios entre la dura realidad y la comprensión de las cosas. El viaje del héroe: la salida, el paso por el Umbral, y el consejo / guía del Guardián del Umbral; la iniciación, las pruebas (que son las pruebas de la misma vida), el logro de la meta; y el regreso. El reparto del elixir, del conocimiento. Un círculo, que se inicia. Una y otra vez.
He comprendido, no que Ulises era un hombre, sino que cada hombre es Ulises, o que cada hombre lucha por ser como Ulises, por no desfallecer, por marchar a Troya a luchar con la esperanza de regresar a Ítaca, pronto, tarde, ¡regresar!. He comprendido que los Portales están ahí, en cada actividad. Los portales y los Guardianes del Umbral. Al abrir un libro. Al conectarse a Internet. Al visitar a amigos y familia. Al atravesar cualquier puerta. Al poner el bolígrafo sobre un papel en blanco.
En una búsqueda errante de un Guardián que me guíe en mis pasos, he comprendido, que, pronto, yo mismo seré un Guardián cuando mi hijo cruce el Umbral que su madre ha estado preparando por meses. Ya falta poco. Sí. Por él, seré. Espero guiarle con fortuna.
Al igual que me he propuesto un Plan. Me he propuesto escribir todos los días una entrada, por 365 años. Algo positivo sobre libros, todos los días. No más negativismo. Es un Plan que me propongo. Escribir poco o mucho en este blog. Sea leído, o no. Espero que mi ilusión mejore con ello.
Buen domingo. Esta es la bitácora 001/365